EL DÍA QUE BRUCE SPRINGSTEEN ACABÓ EN LA CASA DE UN FAN:»MAMÁ, TRAIGO AL BOSS A CENAR»
Escrito por admin el noviembre 14, 2024
Una de las historias más bonitas entre una estrella del rock y sus fans
En la vida hay momentos que tenemos que echarle un poco de cara para conseguir aquello que deseamos. Por ejemplo, si te encuentras a Bruce Springsteen en el cine de tu barrio, puedes pedirle que vaya a cenar a tu casa en vez de una simple foto. Pues quédate que te cuento como un hombre de St. Louis lo consiguió.
En palabras de Bruce Springsteen, esto fue lo que sucedió: “Estaba solo en un cine una noche libre de la gira en St. Louis viendo ‘Stardust Memories’ de Woody Allen. Durante la película, Woody Allen no es necesariamente tan amable con sus fans. Entonces, me encontré con un chico en el vestíbulo que estaba allí con su novia y le dije: ‘¿Quieres sentarte con nosotros?’. Así que dije: ‘¡Está bien!’”.
Todo el mundo pensaría que la respuesta es NO, ya que las estrellas suelen estar muy solicitadas allá donde van y solo quieren estar tranquilos. Pero… esto fue lo que pasó: “Fui, me senté y vimos la película”, contaba Springsteen. “Y él me preguntó: ‘¿Así es como te sientes con tus fans?’. Le dije: ‘Bueno, no tanto’. Y él me respondió: ‘Me voy a casa ahora. ¿Quieres venir a casa conmigo y conocer a mis padres?’. Y le dije: ‘¡Está bien!’”.
Bruce aquí demostró que es mucho más cercano con sus seguidores que otros famosos. Quizá algo influenciado por la película que habían ido a ver, la relación entre la estrella y sus fans era muy mala y quería dejar claro que él no es así. Así acabó la noche: “Y entonces fui a algún lugar de St. Louis con este chico, y entramos por la puerta. Eran aproximadamente las 11 de la noche, y él dijo: ‘¡Mamá! ¡Mamá!Tengo a Bruce Springsteen conmigo’. Y ella dijo: ‘¿Quién?’ Y él corrió a su dormitorio, y salió con el álbum y le mostró la portada del álbum y dijo: ‘ ¡Bruce Springsteen!’·.
“Por supuesto, entonces ella dice: ‘¡Dios mío! Déjame prepararle unos huevos’. Así que alrededor de la medianoche, estaba sentado en una pequeña casa en St. Louis, comiendo unos huevos con este niño y su madre. Y los vi durante décadas después de eso, cada vez que veníamos a la ciudad” concluía el jefe.